“Puedes compartir todo lo que quieras durante el día, con tanta creatividad como desees. Puedes dar vida a tu historia de una manera nueva con herramientas de texto y dibujo. Las fotos y videos desaparecerán después de 24 horas”. Estas características, que a cualquier usuario de Snapchat le son familiares, describen a Stories, la última novedad que trae Instagram y por la cual ha recibido innumerables críticas por su exagerado parecido con la red social del fantasma.
El pasado 2 de agosto la red social de fotografías Instagram anunció el lanzamiento (sin fecha oficial para su implementación en la app) de una nueva herramienta a la cual llamó Stories. Con ella, los usuarios podrán realizar publicaciones con características diferentes a las fotos y videos habituales ya que les pueden agregar elementos como trazos y texto.
Este contenido se encontrará en una sección a la cual se tendrá acceso a través de la foto de perfil, la cual tendrá un anillo de color a su alrededor cuando se hayan realizado publicaciones nuevas. Pero a diferencia del resto, éstas no permitirán likes o comentarios públicos; si alguien desea escribir algo relacionado con la imagen o el video publicado, deberá hacerlo mediante un mensaje privado.
Stories poseerá la misma configuración de privacidad con la cual cuenta el perfil de usuario, es decir, si el perfil es privado, esta sección también lo será. También es posible que pueda ocultarse el contenido de Stories a cualquiera de los contactos y hacer seguimiento de quienes han visto las publicaciones deslizándose sobre las mismas.
Dicen que Instagram hizo un copy-paste y su CEO responde: “Totalmente”
Era previsible que una vez se diera a conocer esta nueva herramienta, muchos acusaran a Instagram de cometer plagio ya que la dinámica de Stories es idéntica a la red social de contenido efímero Snapchat. Pero en lugar de pretender ocultar lo evidente, el jefe de la app de fotografías, Kevin Systrom, le otorga a Snapchat “todo el crédito” por la creación de esa forma de comunicación en los medios sociales.
“No se trata de quién inventó algo. Se trata de un formato y de cómo llevarlo a una red y colocar tu propio sello en él”, dijo Systrom en una entrevista que ofreció a TechCrunch. “La innovación se produce en el valle (Silicon Valley), la gente inventa formatos y eso es genial. Y entonces lo que ves es la proliferación de esos formatos. Así, los nombres de usuario “@” los inventó Twitter. Los hashtags fueron inventados en Twitter. E Instagram los tiene”.
A su criterio, no se trata solamente de inventar nuevos formatos, sino de ver lo que hacen los demás, analizar su impacto y ver si pueden ser aplicados en productos propios. “¿No te parece que Snapchat ha hecho un trabajo realmente impresionante? Facebook ha hecho un gran trabajo. Instagram ha hecho un gran trabajo. Creo que todas estas empresas han hecho un gran trabajo… La cuestión es: ¿qué haces con ese formato? ¿qué haces con esa idea? ¿construyes algo en ella? ¿le agregas cosas nuevas? ¿estás tratando de darle una nueva dirección?”.
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